martes, 31 de mayo de 2011

El sueño de la razón produce monstruos.


No sé en qué estaba pensando cuando aquella sombra se abalanzó sobre mí devorándome por completo. Tampoco hice caso omiso de aquellos ojos voraces y brillantes que acechaban entre las sombras, aquellos que dejaban percibir un terrible hedor el cual taponaba mis fosas nasales. Me paralizó por completo aquel estruendo que surgió de la nada, dejándome sin respiración, como si hubiera escuchado las trompetas del juicio final. Era insólito que personas como aquellas pudiesen estar ahora mismo en pie, era desconcertante como con cada paso iban perdiendo la forma hasta convertirse en meros recuerdos, grabados a fuego en mi memoria. El aire iba viciándose lentamente, introduciéndose en ritmo constante y pausado, calmando el dolor que vivía dentro. Los rostros se iban desencajando en muecas de sufrimiento, retorciéndose en un terrible torbellino para terminar en un ahogado grito de súplica. El cielo se confundía con una espantosa pesadilla interminable, combinado de azufre y sangre, revuelto con los cadáveres de aves que escrutaban los diminutos cuerpos en descomposición. Seguía sonando la escalofriante melodía de ametralladora, con la caída de hombres, mujeres y niños que marcaban el compás, y volvían la pieza en una sublime ofensa. Cuando finalizó la última bala de cañón, se despejó por completo el cielo, pude saborear de nuevo el dulce amanecer que surgía decisivo tras las montañas. Cerré los ojos para disfrutar al máximo como una pequeña brisa acariciaba mis mejillas. Y cuando los abrí, la luz me dio de lleno en la cara, comprendiendo que ya había despertado.

jueves, 26 de mayo de 2011

miércoles, 25 de mayo de 2011

"Bueno chicos y chicas, este va a ser mi último comentario en esta foto. Solo deciros que ha sido un placer conoceros...? Bueno, relativo, digamos que no y según que casos. No ha sido mi mejor curso, no os lo voy a negar, y tampoco me importa si ha sido el vuestro (viva mi egoismo). Solo deseo que tengais una vida, no plena (o si aquellos que se la merezcan), porque tampoco me interesa, pero que tengais algo que después recordar. Yo, personalmente me llevo varios recuerdos, gratos y desagradables, pero eso no cambia nada. Siempre dicen que el último año es un año para recordarlo, y lo recordaré chicos, lo recordaré, obviamente algo así ni mi memoria lo puede olvidar. Entre estos últimos días, he llegado a pensar que mi bachillerato más que de humanidades, era de escénicas, vosotros si que valeis. He llegado a ver como las disputas diarías y “ese odio” tan comentado entre compañeros se soluciona con un examen. No pasa nada, yo no voy a echar en cara nada más, porque es algo que me importa tan sumamente poco, que veo una perdida de tiempo seguir con tanta tontería. Asique, aquí dejo mi comentario de despedida, os importe como si no. Como ya he dicho, que os vaya en vuestras vidas, y no quiera Dios que se crucen los caminos.

Atentamente: Samuel."



Y así, es como me he despedido de unos "compañeros" (por llamarlos de alguna manera) en una foto donde lo unico verdadero era la pared del fondo. Y termina todo, empecé con tristeza, y pensando que iba a echar de menos. Que lastima que cambie tan rapido de parecer, sin motivos ni nada por el estilo, es solamente por mi bipolaridad. Me espera a saber Dios, pero es lo que menos me importa, se que voy a encontrarme con personas parecidas a semejantes individuos, pero una y no más santo Tomás. Y así, dedico una entrada de mi blog a "personas" que no se merecen ni aire.

martes, 17 de mayo de 2011

domingo, 15 de mayo de 2011

lunes, 9 de mayo de 2011

Días ficticios

Dime, en qué nos hemos convertido... y cuando. El por qué me da igual, solamente quiero saber en qué.



Días para pensar...

domingo, 8 de mayo de 2011

Días de lluvia

La ventana estaba totalmente abierta, y trás ella un gran diluvio se adelantaba por los barrotes. Entraba ese frío agradable, típico de la lluvia, acariciando con delicadeza. "Cierra la ventana, se va a mojar todo" me dijiste sin apartar la mirada del libro que estabas saboreando."Es solo agua" dije sonriendo mientras permanecia sentado delante de la ventana. Pequeñas gotas de lluvia iban alcanzando mi cara, enfriandome lentamente los pies y las manos. "No seré yo quien friegue después todo ese charco" me reprochaste mientras cambiabas de página. No le contesté, sabía que sería yo quien después se encargaría de limpiar todo aquello, pero mientras tanto disfrutaba de como el sonido de la lluvia cayendo me hipnotizaba por momentos. Cerré los ojos y me imaginé en medio de una gran avenida, bajo el chaparrón de agua, sintiendo total libertad en el momento. Daba vueltas, con los brazos totalmente extendidos, como cuando suele ocurrir en las películas. No me di cuenta de que tenía los brazos levantados en ese momento hasta que llegaste por detrás y agarraste mis manos. Acomodaste tu cabeza en mi hombro, sin soltar mis frías manos. No te importaba nunca que las tuviese frías, decías que era algo que me caracterizaba, algo que en cierto modo te agradaba. Recorriste con tu diminuta nariz la fina linea de mi columna vertebral, con la delicadeza de un gato, hasta llegar a mi nuca. En ese instante me giré y clave mis ojos en los tuyos, tan dulces y profundos. "Me encantan los días de lluvia" susurré despacio sin apartar la mirada. Termine de perderme en tus ojos cuando dijiste "Me encantas en los días de lluvia". Fuera seguía lloviendo.

sábado, 7 de mayo de 2011

miércoles, 4 de mayo de 2011


Soy de los típicos que cuando se agobia suele necesitar su tiempo sin nadie a su alrededor. Pero a su vez es justo el momento en el que necesita que haya alguien que le haga recordar que no está muerto, que no anda solo. Pero aun así callará.
Hasta matarse por dentro.

Ahora es cuando empieza lo bueno, veamos si sobrevivo a todo esto.