Si no duele, no es amor.
Es sólo una percepción, y no una
definición. Si empiezo con una rima, es que la cosa va bien. Considero que si
no sientes el típico pinchazo, no puedes denominarlo amor de verdad, me refiero
al que describen en tantas películas, si. Si no has sentido esas mariposas que
para mí es como revolver el estómago, náuseas y ganas de vomitar (que parece
que estoy describiendo un parto, pero no), entonces, quizás debas replantearlo.
Yo lo interpreto como cuando falta algo, cuando sientes un fuerte vacío. El
tiempo pasa muy despacio, y parece que todo a tu alrededor no existe. Es cuando
andas por la calle y de pronto tropiezas y vuelves a poner el tiempo en marcha
dos segundos antes de volver a caer. Y todo gira, y nada importa, porque
realmente lo que necesitas está justamente al otro lado. Y cuando no estás
durmiendo realmente no estás despierto, porque antes podías notar algo que te
decía que estabas ahí. Pero lo que más abundan son las faltas de aliento,
momentos en los que sientes que te están apretando el corazón con las manos y
no puedes respirar. Te ahogas. No sé, llamarme exagerado, pero es que llevo lo
poco de mi vida alimentándome de una idea que luego lamentablemente me
destrozan. Y si ya no lloras con la típica frase estrella de una canción, la
que te hace recordar algo, olvídate. Son los momentos en los que necesitas solamente
su abrazo, o decir dos simples palabras. Es justamente ese momento, en el que
sientes que lo que había antes bajo tu pecho ahora ya no está, se ha ido. Y te
das cuenta con ese dolor, que lo que sientes no es amor.
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